El misterio genético de “los peces que vienen de las nubes”

Las particularidades genéticas de los peces anuales que hay en Uruguay intrigan a los científicos.                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                         Los peces anuales se distinguen por vivir en charcos temporales, que tiene agua solamente en épocas lluviosas y se secan al comenzar el verano. Los embriones de estos animales – que son los vertebrados con el ciclo de vida más corto que se conoce- tienen la característica de resistir a las condiciones de desecación, ya que permanecen enterrados en el fondo del charco, en estado de detención, hasta que en el otoño los charcos vuelven a llenarse de agua.

La Dra. Nibia Berois, Investigadora Grado 4 de PEDECIBA Biología y Prof. Agr. del Instituto de Biología de la Facultad de Ciencias (UdelaR), explicó a SobreCiencia por qué estos peces son un modelo de investigación privilegiado para profundizar en temas como el desarrollo embrionario y el envejecimiento.

– “Los peces anuales son especies de peces teleósteos, que están distribuidos en el planeta en África y en América del Sur. Salvo estas dos grandes zonas del mundo, no hay peces anuales y esto nos hace hacernos grandes preguntas: ¿En qué momento evolucionaron? ¿Fue antes o después de que se separaran los continentes? Aquí en nuestro país encontramos varias especies, en la zona costera de Rocha y de Treinta y Tres, en la zona central paralelo al Rio Negro, y en Villa Soriano, y hay otro gran grupo siguiendo el Rio Uruguay. Estos peces están referenciados a grandes cursos de agua y también están relacionados con las cuencas”- explica.

Berois agregó que a estos peces les pasa lo peor que le puede pasar a un pez, que es quedarse sin agua, pero sin embargo, igual sobreviven. Ellos se reproducen durante toda la estación lluviosa, y cuando el charco empieza a secarse, lo que queda en el fondo son los embriones, que son los que tienen “el kit de supervivencia” y se quedan como en estado de detención (denominado diapausa), como si estuvieran muertos. – “Y con las primeras lluvias, a las 24 horas, el charco se llena de pequeños peces. De ahí viene ese dicho que dice que son peces que vienen de las nubes, porque la gente ve un charco que no tenia nada, y de repente tiene peces”- señala.

Particularidades genéticas

En territorio nacional, el género con mayor número de especies es el género austrolebias, que cuenta con características que lo diferencian de otro tipo de peces anuales. Actualmente, el equipo de trabajo de Nibia Berois, trabaja con un grupo de científicos del Centro de Regulación del Genoma de la Universidad de Chile, con el objetivo de armar el genoma y el transcriptoma de austrolebia.

– “Lo primero que queremos desentrañar es algo que apareció a partir de la investigación de una colega, Graciela García, que es genetista y que descubrió en el año 2014 que el género austrolebia tiene un genoma enorme, casi tan grande como el genoma humano, lo cual es rarísimo para los peces, porque hay otros peces anuales que tienen un genoma como lo esperado. Este tiene el doble, tiene el mismo número de cromosomas, pero tiene muchísimo más ADN y elementos transponibles, que son genes que saltan de un lugar a otro. Esos genes que saltan pensamos que tienen que ver con algún proceso evolutivo de este género. No podemos asociarlo a la anualidad ni a la diapausa. Lo que estamos pensando es que tal vez tenga que ver con la enorme capacidad de especiación que tiene este género porque hay mucha diversidad dentro del género y si eso está en manos de esos transposones que saltan. Estamos viendo si están asociados a algún gen especial. Es un enorme signo de interrogación, ojalá podamos publicar el genoma con una hipótesis de lo que está ocurriendo”- detalla.

La científica destacó la importancia del trabajo multidisciplinario para este tipo de investigación, ya que se trata de un tema evolutivo en el que se puede trabajar desde las moléculas hasta las poblaciones, lo que hace que sea imposible abordarlo desde un único enfoque.

– “Nosotros formamos un grupo multidisciplinario. Necesitamos a los genetistas, a investigadores de biología molecular, ecología, zoología y también de comportamiento, porque esto peces tienen un comportamiento reproductivo bien interesante. No se puede trabajar aislado, hay que formar un grupo, y hace 15 años se formó un grupo en la Facultad de Ciencias que estamos trabajando en esto. Y como ocurre siempre, nos conectamos con otros países y estamos trabajando en conjunto. Yo tengo una formación primero más morfológica, después más tisular, celular y terminé en las moléculas, indefectiblemente tenes que hacerte de alguna forma un biólogo molecular. Y en este momento hay que ser bioinformático, o integrar bioinformáticos a tu equipo porque no podés manejar todo. El bioinformático tiene las herramientas para interpretar cosas que nosotros como biólogos no las vemos. Tiene que ser un trabajo en conjunto, la interdisciplina es imprescindible”-expresa.

Nibia Berois, junto a Graciela García y Rafael O. de Sá, publicaron: “Annual Fishes: Life History Strategy, Diversity, and Evolution”, un libro que reúne todo lo que se sabía en el mundo sobre estos peces hasta fines del 2015.

– “Cuando se nos ocurre hacer el libro, empezamos a invitar gente e inmediatamente aceptaron, hay 38 autores en este libro, la mayoría son uruguayos porque el grupo más grande de estos peces está aquí. Pero es un libro internacional que reúne todo lo que se sabía en el mundo sobre estos peces y tiene también la intención de despertar vocaciones”.

Este es un organismo excelente para estudiar la evolución y para analizar los pasos de la evolución, porque en biología no podes hablar de ningún tema sin hablar de evolución. Si nosotros tenemos ahora estos peces adaptados a este medio, es porque llevó millones de años de evolución, pero no sabemos cuántas especies se perdieron en el camino. Las cosas son hechos que uno ve, y es una mirada y este modelo atrae mucho porque se puede ver ahora la foto del resultado final”-reflexiona.

Texto: Alexandra Perrone

Foto: Web Radio Uruguay

Entrevista: Gustavo Vila